lunes, 16 de septiembre de 2013

LA MESA REDONDA




MESA REDONDA
La mesa redonda consiste en una discusión formal que se hace ante un auditorio en la que participa un grupo seleccionado y preparado de personas, generalmente especialista en el tema, bajo la guía de un moderador. Su objetivo es dar a conocer el punto vista de distintas personas sobre un tema determinado.

Pasos para llevar a cabo una mesa redonda
1.       Preparación:
·         Determinar el tema que se desea tratar.
·    Escoger a las personas que expondrán en la mesa redonda (tres a seis integrantes) más un moderador.
·        Organizar la estructura de la discusión: determinar el orden de la exposición y el tiempo de cada   intervención.
·         Preparar el lugar en el que se realizara la discusión.

2.       Al realizar la discusión se debe considerar:
a.       Tareas del moderador
·         Hacer una breve introducción del tema que se va a tratar.
·         Presentar a los expositores.
·         Explicar la organización que se le dará a la mesa redonda, señalando claramente el tiempo y el orden de participación.
·         Iniciar la presentación de los distintos puntos de vista.
·         Sintetizar el contenido de las intervenciones de cada expositor.
·         Cerrar la discusión y dar paso a que el auditorio pueda formular algunas preguntas.

b.      Tarea del expositor
·              Preparar el material y sus intervenciones, investigando previamente.
·         Expresan sus puntos de vista e ideas con claridad y precisión, demostrando manejo del tema.
·              Escuchar con atención las intervenciones de los otros expositores.
·              Seguir las indicaciones del moderador para presentar los puntos de vista.
·              Hablar solo del tema acordado, respetando los tiempos asignados por el moderador.
·             Respetar a los participantes aunque tengan posiciones diferentes a la propia, dirigiéndose       a    ellos sin descalificaciones.

3         Cada vez que nos comunicamos oralmente debemos:

·                  Pronunciar correctamente las palabras.
·                  Hacer pausa cuando sea necesario.
·                   Adecuar la entonación (énfasis) según la intención comunicativa.
·                   Usar un lenguaje formal acorde a la situación.
·                    Hablar con volumen adecuado, de manera que todos escuchen las intervenciones.




martes, 10 de septiembre de 2013

¿QUÉ ES UNA ARGUMENTACIÓN?
Es una de las manifestaciones del discurso oral o escrito, cuya principal finalidad es la de convencer de algo a quienes escuchan o leen. A través de razonamientos, se intenta probar o justificar aquello que se defiende y, al mismo tiempo, rebatir las opiniones contrarias. Como diría Miguel de Unamuno.
"Venceréis, porque tenéis sobrada fuerza bruta; pero no convenceréis. Para convencer hay que persuadir; y para persuadir necesitáis algo que os falta: razón y derecho".

LA ESTRUCTURA DE LA ARGUMENTACIÓN
En muchos textos argumentativos se distinguen tres partes:
  • La tesis o idea básica que se va a defender. Esta se presenta de forma concisa y clara.
  • El cuerpo de la argumentación, donde se apoya, justifica o fundamenta la tesis con una serie de razones.
  • La conclusión, extraída a partir de los argumentos expuestos, con la que se refuerza la tesis inicial.
La verdadera libertad (Michele Abbate)
Tesis
Un individuo sólo es libre si puede desarrollar sus propias potencialidades en el seno de la sociedad.
Argumentación
Ser libres no significa solamente no tener miedo, poder expresar la propia opinión sin temor a represalias; también significa conseguir que la propia opinión pese realmente en los asuntos de interés común y sea requerida por la sociedad como contribución necesaria.
Libertad es plenitud de vida. No soy libre si, disponiendo de un cerebro que puede producir cien, se me deja vegetar en una ocupación donde rindo diez. En el mundo actual es más libre el profesional que trabaja de la mañana a la noche, dando todo de sí a sus enfermos, a sus discípulos, a sus clientes, que acuden a él confiando en su juicio y en su ciencia; es más libre el político, el sindicalista, el escritor que se enrola en una causa que trasciende su propia persona, que los millones de súbditos de la moderna sociedad industrial, con su "semana corta" y las escuálidas perspectivas de disipar su "tiempo libre".
El mayor riesgo que corre hoy la libertad es que la mayoría de los hombres son inducidos a identificarla con un estado de subordinación, de tranquila sujeción, de evasiones periódicas controladas y estandarizadas, al cual su vida parece reducirse inexorablemente.
Conclusión
Sólo dando significado a la vida de todos en una sociedad plural defenderemos de modo no ilusorio la libertad de cada uno.